Martina Klein tiene unos intensos ojos azules, una belleza cautivadora y una elegancia sublime, aunque detrás de todo esto se esconde su mayor atractivo, una personalidad cercana y amable que te conquista desde el primer segundo. Es modelo, presentadora, escritora y humorista. Se ha subido a las pasarelas más prestigiosas del mundo, ha publicado recientemente ‘¡Zasca’!, su primera novela infantil y en julio, llegará a las pantallas de todos los cines con la película ‘Sólo Química’. Dedica parte de su tiempo a colaborar en causas benéficas y prioriza sobre todo, su papel como madre. Una mujer todoterreno cargada de ideas y nuevos retos, así es Martina Klein.
Nació en Buenos Aires aunque con solo once años se vino con su familia a España ¿Qué echa de menos de su país natal? ¿Ha tenido alguna vez pensamiento de volver?
Lo que más extraño es el carácter de las personas, su forma de relacionarse, son muy cálidos y quizá, esa sea también una parte de mi personalidad con la que me siento muy identificada. A pesar de ello, nunca he pensado en volver. Llevo en España mucho más años de los que pasé allí y aunque me gustaría regresar de visita, no me planteo irme a vivir a Argentina de forma indefinida.
¿Siempre tuvo claro que quería ser modelo o de niña tenía alguna otra profesión soñada?
Para nada, no lo tenía nada claro. De hecho, siempre he admirado a la gente que sabía a la perfección a lo que querían dedicarse. Me gustaban muchos campos profesionales pero incluso cuando me preparaba para selectividad dudaba sobre cuál de todos elegir. Al final la vida me ha ido encaminando poco a poco, digamos que ha ido sucediendo de forma pausada y natural.
Sus inicios fueron a los 15 años ¿Cómo recuerda sus comienzos en el mundo de la moda?
Pues con mucha ilusión y ganas. Desde luego no fue algo que ocurrió de la noche a la mañana, fue una evolución paulatina. Comencé a hacer castings, sesiones de fotos, desfiles para algunas firmas y todo fue muy poco a poco. Los primeros años incluso compaginaba mi trabajo como modelo con otros que hacía de manera eventual y por supuesto, con mis estudios. No fue hasta hacer selectividad cuando me planteé dedicarme a la moda profesionalmente. Por eso, no hubo un cambio repentino en mi vida sino que me fui adaptando a medida que fueron surgiendo las oportunidades en la industria.
Ha colaborado con las más prestigiosas firmas de moda y se ha subido a las principales pasarelas del mundo ¿Se imaginaba llegar tan lejos?
No, para nada. Jamás imaginé una carrera así. Me siento muy afortunada por haber vivido profesionalmente tantas cosas. Ha sido un auténtico regalo. Uno siempre sueña con desfilar para los diseñadores más prestigiosos del panorama, especialmente, cuando comienzas, pero era difícil pensar que todo lo que me ha sucedido pudiese hacerse realidad.
Ha desfilado en Milán, Nueva York, Londres París…si tuviese que elegir una pasarela ¿Con cuál se quedaría?
Me quedo con Barcelona y Madrid. Es verdad que desfilar en una pasarela internacional, para diseñadores como Balmain, con toda la repercusión y el impacto social que tienen es una experiencia única pero de Barcelona y Madrid guardo muchos momentos, anécdotas y por supuesto, el cariño de mis compañeras de profesión, con las que he vivido momentos únicos.
No solo ha trabajado como modelo. A lo largo de su trayectoria hemos podido comprobar su faceta de actriz, diseñadora, escritora… ¿Hay algo que se le dé mal?
Muchas cosas, muchas (responde entre risas), pero intento afrontar cada reto profesional con dosis de cariño. Detrás de cada proyecto hay mucho trabajo, nada ocurre de forma casual y lo importante es ponerle ganas a todo lo que haces.
De hecho en esa vertiente de escritora es autora del libro ‘¡Zasca!’ que se publicó el pasado mes de mayo y que describe a la perfección el universo infantil ¿Cómo surgió la idea?
Bueno he tenido la suerte de ser columnista de publicaciones como Marie Claire, La Vanguardia o El Periódico con la total libertad de escribir sobre lo que he querido. Siempre ha sido un campo en el que me he sentido totalmente cómoda. Es cierto que han surgido proyectos para escribir alguna que otra novela pero no sé, no me he sentido hasta el momento preparada para afrontar algo de esas dimensiones. No me atrevía. Sin embargo, con ‘¡Zaska!’ lo tuve claro. Es un libro infantil que utiliza un lenguaje literario más sencillo y que, a pesar de sus 109 páginas, intercala ilustraciones y personajes fáciles, cercanos al mundo de los más pequeños. A pesar de todo, sigue siendo un reto para mí, pero un reto más factible.
¿Y se atreverá algún día a escribir un libro sobre su experiencia en el mundo de la moda?
No es algo que me plantee a corto plazo pero sí, por qué no. Aunque trataría de que fuese un libro muy yo, es decir, que desmitificase el mundo de la moda y que incluso tuviese mucho de irónico. Un libro donde no faltasen las anécdotas y donde todo fuese contado con un toque de humor, riéndome incluso de algunas de las situaciones más cotidianas que vivimos las modelos.
Además de su labor profesional siempre dedica parte de su tiempo a causas benéficas. Háblanos un poco de los últimos proyectos en los que haya participado.
Sí, me gusta colaborar activamente con cualquier causa benéfica para la que sea necesario ayudar. Uno de los últimos proyectos en los que he participado es a favor de las madres víctimas del cáncer. Por desgracia todos tenemos a nuestro alrededor algún caso y es importante concienciarnos de la importancia de un reconocimiento precoz y de las terapias alternativas que ayudan a tener una mejor calidad de vida frente a la enfermedad. Para lograrlo he colaborado en el diseño de unos bolsos solidarios que persiguen el objetivo de recaudar fondos para la Asociación de Oncología Integrativa y su programa de apoyo a madres con cáncer.
Con tanto compromiso profesional ¿Cómo logra compatibilizarlo con su ámbito más personal?
Generalmente tengo tiempo para todo, la verdad es que en ese sentido no me puedo quejar y aunque a veces la conciliación es difícil, solo es cuestión de priorizar. Hay tiempo para todo si nos organizamos, y por suerte, mi trabajo me permite pasar momentos con mi hijo.
¿Le preocupa el paso del tiempo? ¿Cuáles son sus trucos de belleza para mantenerse siempre perfecta?
Esa es una pregunta que me llevan haciendo desde que comencé en el mundo de la moda, aunque por aquellos tiempos tenía quince años y entonces, qué me iba a preocupar el paso del tiempo (responde entre risas). Pero ahora sí, me preocupa. Ya no como modelo sino como mujer. Es innegable que con los años el cuerpo cambia y se nota, pero por eso procuro cuidarme.
En cuanto a mis trucos de belleza, no existe el secreto del éxito. Intento comer bien, hidratarme, hacer ejercicio y por supuesto, ser feliz. Los momentos de mi vida en los que he sido más feliz han coincidido con aquellos en los que me he encontrado mejor físicamente. Y por supuesto, la llegada del verano. A mi evadirme y pasar tiempo en la playa me sienta fenomenal.
En la 18 edición del Festival de Cine de Málaga presentó junto a sus compañeros de reparto la comedia ‘Sólo Química’ donde usted participa ¿Qué podremos encontrar en esta película?
‘Sólo Química’ es una comedia romántica donde he tenido la oportunidad de trabajar junto a grandes compañeros de profesión. La verdad es que me encanta que hayan contado conmigo para la película y que su director, Alfonso Albacete, me diese la oportunidad. Se estrena el próximo 24 de julio y no solo podremos ver una película de amor como tal, sino que además las risas están más que aseguradas.
Si tuviese que quedarse con un solo momento de todos los que le ha regalado su carrera ¿Con cuál se quedaría?
Es una pregunta bastante difícil. A lo largo de todos estos años de profesión he vivido sesiones y desfiles muy potentes pero han sido tantos momentos únicos que me cuesta elegir solo uno.
¿Cómo se dibuja su futuro profesional de aquí a los próximos meses?
Ahora mismo me encuentro inmersa en mi faceta de escritora. ‘¡Zasca! solo es el primer libro de una colección y estoy en pleno proceso de edición del segundo y escribiendo el tercero. Aparte, también sigo con algunas promociones y presentaciones.
¿Le queda algún sueño por cumplir?
Prefiero vivir día a día sin plantearme demasiadas cosas a largo plazo. Ir afrontando las cosas como van viniendo me ayuda a valorar más lo que tengo y darme cuenta de lo afortunada que soy. Para mí no hay mejor sueño que ese.